Realizada el día 13 de julio de 2013
Recorrido: 22 kilómetros.
Empieza un nuevo día. sexto de mi aventura por los Caminos de Ronda. Y de momento estoy disfrutando mucho, sin apenas contratiempos (a parte de las hormigas devoradoras de comida y los precios desorbitados...) Los problemas que se me puedan presentar a diario los estoy resolviendo sin ninguna dificultad. La meteo me esta regalando unos días espléndidos. Y estoy descubriendo rincones de extraordinaria belleza. Creo que no puedo pedir más...
Sigo por los humedales y marismas |
Hoy me propongo llegar a Roses. Un recorrido muy asequible, puesto que, igual que ayer, es todo plano.
Como cada día, empiezo a caminar a primera hora de la mañana. Esa es la mejor hora. No hace mucho calor, los caminos y los pueblos están casi desiertos, y las primeras luces del día arrancan hermosos destellos de colores y bañan de suave luz los caminos y sus preciosos rincones.
En cuanto dejo la playa, me vuelvo a adentrar en zona de humedales.
Se han instalado pasarelas de madera y observatorios de animales para poder recorrer la zona y disfrutar de toda la fauna típica de los humedales. Puedo observar muchas aves acuáticas, pero las que realmente me fascinan son una gran colonia de cigüeñas.
Cigüeñas |
También la vegetación hace que sea un lugar digno de visitar. Exuberante vegetación, extensos cañizales, enormes árboles y gran variedad de flores.
Este es un lugar muy apreciado por fotógrafos (con paciencia pueden tener al alcance de sus cámaras muchas especies de animales). También por gente que busca paz y relax. O familias con niños, que pueden pasar agradables e instructivas jornadas...
Ideal para disfrutar de la fauna |
Las pasarelas serpentean entre juncos y cañas, canales y lagunas, se convierten en camino de tierra y llego al Cortalet.
El Cortalet es un centro de información y documentación, en el que hay una amplia zona de pic-nic, máquinas de bebidas y servicios. Aquí podemos pedir todo tipo de información relativa a los humedales, la fauna, rutas e itinerarios... Un buen punto para descansar un buen rato, recuperar fuerzas y disfrutar de alguna de las muchas rutas que nos pueden proponer.
Además, hay una amplia zona de aparcamiento y está a un tiro de piedra de Sant Pere Pescador y Castelló d'Empúries. Ideal para una matinal bien tranquila...
Sigo el GR, salgo de la zona de humedales y ahora ya por pista forestal pongo rumbo a Castelló d'Empuries.
De nuevo atravieso inmensos campos de cultivo (la mayoría cereal y forraje) y no tardo en llegar a esa población. También se merece una visita, puesto que su núcleo antiguo es extraordinariamente monumental. La iglesia de Santa María, Conventos de Santo Domingo y Palacio Condal, Santa Clara, la Merced, Santa Magdalena... Y un rico y extenso patrimonio civil. Una gozada, para quienes nos gustan los edificios clásicos...
Iglesia de Santa María, en Castelló d'Empúries |
Debo seguir. Roses aún está lejos...
Sigo por el GR-92, aunque me desvío un poco para recorrer los marismas. Está muy bien marcado todo el camino.
El camino me lleva a visitar una nueva zona de humedales y marismas, cruzando canales por puentes de madera. Un encanto. Por esta zona también me cruzo con grandes rebaños de vacas con sus crías que en algún momento no se han mostrado demasiado sociables, que digamos...
Estos bichos no parecían muy amigables... |
Llego a una carretera que sigo durante unos metros, hasta que a mi derecha encuentro el desvío: a Roses. Y para allá que voy.
El camino hasta esa población es un paseo. Sólo 7 kilómetros de pista forestal y habré llegado.
Es media tarde y me permito entretenerme en los detalles del paisaje.
La Serra de Rodes con Palau-saverdera a mi izquierda.
Las marismas y Empuriabrava a mi derecha.
Y Roses ya a tocar...
Roses |
Una etapa muy cómoda y fácil, pero variada y rica en cuanto a paisajes y entornos.
Muy recomendable, al igual que la anterior, para hacer en familia o con niños. Todo es terreno completamente plano y sin ninguna dificultad.
Bueno, se acabaron las etapas llanas. Lo que me queda de aquí a Portbou es el Cap de Creus, Serra de Rodes y el Massís de l'Albera. Todo un reto para mis piernas....
Por eso ahora toca descansar y recuperar fuerzas.
Mañana será otro día...
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